«Born to Run»: un vistazo al primer capítulo de las memorias de Bruce Springsteen

Siete años le tomó a Bruce Springsteen escribir su esperada autobiografía. Lo hizo en medio de giras y grabaciones. Al borde de los 67 años de edad, el ganador de 20 premios Grammy vio finalmente impresos los momentos más resaltantes de su vida, ligada a la música desde siempre.

Sería injusto decir que “Born tu Run” es un libro únicamente para fanáticos de Bruce Springsteen. Cualquier persona que disfrute del rock producido antes del siglo XXI puede encontrar en estas memorias muy buenas referencias sobre legendarios solistas (Elvis Presley) o míticas agrupaciones (The Beatles) que marcaron a varias generaciones.

La vida de ‘El jefe’ no fue siempre giras, videoclips o grabaciones de estudio. Hubo un antes, completamente alejado de las comodidades o los millones de dólares. Y es esa quizás la parte más deliciosa del primer capítulo de estas memorias publicadas por Literatura Random House.

Leer “Born to Run” es, en primer lugar, certificar la influencia que la familia cercana del rockstar tuvo en su las distintas etapas de su vida y de su carrera musical. El libro, dividido en tres capítulos cuyos títulos son los mismos de tres de las canciones más recordadas del artista (“Growin’ up”, “Born to Run” y “Living proof”), cuenta la historia del hijo de un padre alcohólico y una esforzada madre en la América de la segunda mitad del siglo XX.

Ser testigo de un matrimonio complejo y en aparente riesgo de rompimiento propicia en el adolescente Bruce un mayor acercamiento a los abuelos, también pobres, pero capaces de contentarse con muy poco para ser felices. Destaca en el primer capítulo (“Growin’ up”) el momento en que Bruce –aparentemente desesperado por salvar a su madre de una golpiza—impacta con el bate de béisbol a su padre ebrio.

(Bruce habla sobre el tema “Growin’ up”. Fuente: YouTube)

Si Bruce no encontró en su papá el cariño y la comprensión que cualquier niño espera recibir, todo lo contrario pasaría con su madre, una mujer trabajadora que fue gravitante económica y afectivamente en los primeros pasos de esta estrella del rock. Fue ella quien lo apoyó prestando dinero para comprarle su primera (y usada) guitarra eléctrica. Escuchando los mismos temas que oía su madre, Bruce Springsteen parece haber formado el oído musical que lo haría tiempo después no solo un cantante, sino también un verdadero creador de melodías fascinantes.

Un hito fundamental de “Growin’ up” es, sin duda, cuando Bruce queda cautivado por una presentación de Elvis Presley en “The Ed Sullivan Show”. “Cuando acabó todo aquella noche, aquellos pocos minutos, cuando el hombre de la guitarra desapareció envuelto en el griterío, me quedé como en trance ante la televisión, con la mente ardiendo. Yo también tenía dos brazos, dos piernas, dos ojos, tenía una pinta horrible pero ya lo solucionaría… ¿qué me faltaba entonces? ¡¡La guitarra!”, (Página 57).

Poco tiempo después –en el mismo programa de televisión—serían presentados The Beatles, agrupación británica que también influyó notoriamente en el deseo de Bruce Springsteen por ser un artista. “Allí estaba yo sentado, con el corazón palpitante, esperando ver por primera vez a mis nuevos salvadores” (Página 63). ‘El jefe’ tenía cada vez más claro que su futuro estaría ligado únicamente a las guitarras y los amplificadores.

Sin embargo, vender más de 120 millones de discos a nivel mundial, dar cientos de giras en diversos continentes e ingresar al Salón de la Fama del Rock and Rock no es fácil. A partir de esos dos instantes vitales en “Growin’ up”, la autobiografía de Bruce Springsteen se convierte casi en un diario de viajes, decepciones y penurias. Aquel muchacho que vio en el rock una forma de liberarse de las cadenas que lo ataron emocionalmente durante su infancia, debió exigirse para recién en los setentas brillar junto a la E Street Band.

Antes debió pasar por bandas como The Castiles y Steel Mill, y descubrirse a sí mismo negociando contratos discográficos, despidiendo músicos, cobrando el pago de sus conciertos y repartiendo el dinero mano a mano, pero principalmente entregándose por completo sobre el escenario en shows interminables. Es decir, haciéndose de aquella personalidad que tiempo después lo haría acreedor de un apelativo tan corto como contundente: “El jefe”.

SOBRE EL LIBRO
Título: “Born to Run”
Género: Biografías
Editorial: Literatura Random House
Precio: 79 soles
Páginas: 564

Compártelo