“Origen” de Dan Brown no es un libro corto, y si bien el detalle podría no importarle mucho a sus seguidores acostumbrados a leer muy extensas obras, a mí sí me importó. Son 632 páginas que leí en dos semanas. En esta nota compartiré mi experiencia con esta historia de ciencia ficción mezclada con momentos claves de la historia española contemporánea.
Edmond Kirsch, multimillonario futurista y ex alumno de Robert Langdon, intenta dar a conocer un descubrimiento que, según él, cambiará la forma en cómo la población mundial concibe su existencia. Dicho alcance podría significar una grave crisis en todas las religiones, por lo que estas preferirían que «la revelación» nunca se haga pública, incluso pagando el precio que sea necesario.
Sin embargo, Kirsch no está dispuesto a que nada frustre su objetivo, por lo que convoca a una majestuosa presentación en el Museo Guggenheim de Bilbao. Allí invitó a su maestro Robert Langdon, a quien poco antes le confesó que dialogó con tres líderes máximos de las iglesias más importantes del mundo: el catolicismo, el judaísmo y el islamismo.
Todo parecía ir sin problemas hasta que, ya a punto de revelarse el hallazgo de Kirsch, este es asesinado por Luis Ávila, un almirante en retiro que jamás pudo resolver los traumas personales que le generó ver morir a su familia en un atentado.
Aquí está la mejor parte del nuevo libro de Dan Brown, es más, el inicio de su verdadera trama: cómo Langdon y Ambra Vidal –directora del Museo Guggenheim de Bilbao y prometida del príncipe de España, Julián—empiezan una peligrosa carrera hasta dar con la clave que Edmond dejó para culminar su reveladora exposición. Pero no lo harán solos. “Origen” incursiona en la inteligencia artificial mediante Winston, una voz creada por computadora que no solo memoriza millones de datos, sino que además siente e inclusive es capaz de culparse a sí misma en caso de error. Este personaje se convierte en la tercera punta del triángulo que llegará hasta el final de la novela.
“Origen” no es solo la búsqueda de una clave, también es un juego de referencias a la historia contemporánea española y quizás mundial. Dan Brown dibuja seres que ciertamente podrían tener algún tipo de familiaridad con famosas personalidades. Julián, el príncipe de España (¿quizás similar en su aspecto y carisma al hoy rey Felipe de Borbón?), Ambra Vidal (¿acaso símil de la reina consorte Letizia Ortiz?) y el propio Edmond Kirsch (¿Acaso el fallecido genio de la tecnología Steve Jobs?). Sin embargo, creo que gastarnos en comparaciones más en profundidad sería un error porque este es un libro de ficción.
En paralelo a estos guiños históricos y al thriller que significa buscar una clave mientras te siguen para matarte, esta novela además tiene personajes secundarios que cumplen el papel de soportar el argumento. Por ratos el obispo católico Valdespino (amigo íntimo del Rey de España y el único de los tres líderes religiosos que no fue asesinado luego de reunirse con Kirsch) gana peso. Ocurre lo mismo con Ávila, quien dentro de su evidente psicopatía resultó ser un fiel seguidor de una secta rebelde del catolicismo: la Iglesia Palmariana.
El relato incluye la existencia de “ConspiracyNet.com”, una mezcla de agencia de noticias de último minuto y fábrica de ‘fake news’, capaz de mantener pendiente a millones de internautas con múltiples teorías conspirativas en torno a dos cosas: el responsable del asesinato de Edmond Kirsch y qué secreto escondía este.
En resumen, son varios los elementos de “Origen”. Protagonistas perseguidos (Robert y Ambra, pero por muchos tramos también Winston), figuras secundarias muy intermitentes (El Rey, el Obispo Valdespino, Luis Ávila y los leales funcionarios de la Casa Real Española). Todos parecen girar alrededor del secreto que Edmond se llevó a la tumba.
La más reciente novela de Dan Brown ha recibido múltiples críticas en España, país donde se desarrolla el argumento íntegramente. Se le cuestiona su poca rigurosidad en cuanto a datos, cifras y referencias al arte y la cultura de dicha nación. No obstante, cada lector deberá responder esta pregunta al leer el texto.
La crítica que yo sí haría está más relacionada a la extensión de un libro que por ratos decae en su nivel de tensión. Si bien Dan Brown es un experto en insertar giros y sorprender así a los lectores (conocer quién finalmente mandó a matar a Edmond es un ejemplo rotundo de eso), considero que hay mucha distancia (en páginas) entre el inicio de la búsqueda de la clave y el desenlace de la novela. Unas páginas menos, en este caso, hubieran servido más.
SOBRE EL LIBRO
Título: «Origen»
Autor: Dan Brown
Editorial: Planeta
Precio: S/69
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