Confiesa que “Nunca seremos normales” (Planeta, 2018) lo escribió casi de un tirón en cuatro meses, mientras Zoe (su hija) dormía y Jaime Bayly (su esposo) hacía su programa de televisión en Estados Unidos. Sentarse frente a un teclado para recordar y escribir. Ambas actividades no le cuestan demasiado. La primera porque es dueña de…